Dentro del complejo conjunto de elementos que forman la totalidad del entramado eléctrico, los centros de transformación cumplen la misión de transformar la energía procedente en alta tensión, en media o baja. De esta manera, se hace posible su uso generalizado para todos los usuarios, gracias a la adaptación del voltaje adecuado que emplean los aparatos en la actualidad. No obstante, existen varios tipos, según su misión y situación, como explica http://centrosdetransformacion.es:
– En punta, que tienen una sola entrada de línea y son llamados también independientes.
– De paso, situados en mitad de una línea y recibe energía por una entrada y sale por otra hacia otro centro.
– En anillo o bucle, los cuales reciben alimentación por ambos extremos de la línea y son los más seguros y completos, situándose en poblaciones urbanas o donde es muy necesario que no existan fallos de suministro como son los centros industriales, los polígonos.
Los identificamos en edificios especialmente construidos para albergar los motores del transformador y la aparamenta, a los cuales solo tiene acceso la propiedad de los mismos. Son el personal autorizado por la propiedad, que coincide con el proveedor de energía en la mayor parte de los casos, pero también pueden ser propiedad de un abonado o un cliente que dispone de sus propias instalaciones y compra grandes cantidades de energía. Y la transforma en baja tensión en sus instalaciones.
Se conocen también los centros de intemperie, que suelen estar sobre apoyo de un poste en mitad del campo, sobre los
que hay una línea de alta tensión. Situados igualmente en la calle se encuentran algunos de enormes dimensiones, los cuales están aislados y rodeados por un perímetro, tienen refrigeración y los podemos ver en determinadas zonas entre poblaciones. Los subterráneos están bajo la vía pública y pueden estar en locales en los sótanos de un edificio y suele ser motivos de falta de espacio arriba en el exterior.
Por su construcción, los hay de obra completamente y mezcla de hormigón y metálicos, aunque también se fabrican todo metal. Son los llamados prefabricados, bien modulares o monobloque según necesidades. Los centros de transformación prefabricados pueden estar completos desde fábrica para ubicarlos solamente, o se montan en el lugar adonde van destinados. Así pues, y sea cual sea el tipo, todos deben superar las inspecciones de seguridad que establece la ley para perpetuar el servicio eléctrico y la integridad de sus operarios.